Farmaindustria celebró hoy en Madrid su Asamblea General Ordinaria en el transcurso de la cual fueron aprobadas la Memoria Anual de actividades de la Asociación y las Cuentas del pasado ejercicio, así como el Presupuesto para el actual.
En sus respectivos informes, el presidente y el director general de la Asociación, Jordi Ramentol y Humberto Arnés, respectivamente, analizaron el fuerte impacto que han tenido para el sector farmacéutico los Reales Decretos-Ley 4 y 8/2010, al que hay que sumar algunas iniciativas puestas en marcha por determinadas comunidades autónomas que están resultando muy lesivas para la industria y están provocando la fragmentación del mercado farmacéutico nacional.
En este sentido, en su informe ante la Asamblea el presidente de Farmaindustria recordó que la merma de ingresos de las compañías farmacéuticas como consecuencia de las medidas contendidas en ambos Decretos Ley supera los 2.000 millones de euros al año, lo que ha provocado la mayor caída del mercado farmacéutico de la historia (8% anual) en un momento en el que se acumula la mayor deuda hospitalaria (con una demora media en los pagos hospitalarios que supera los 410 días y una deuda de más de 5.000 millones de euros).
Jordi Ramentol enumeró algunas de las consecuencias de la difícil situación por la que atraviesa actualmente el sector farmacéutico en España, como son la pérdida de unos 5.000 puestos de trabajo directos y unos 20.000 entre indirectos e inducidos, el estancamiento de la inversión en I+D, la entrada en pérdidas de muchas compañías farmacéuticas, o la disminución de su ritmo inversor, entre otras. “Con esta medidas, el Gobierno y las comunidades autónomas han puesto a nuestra industria en una situación crítica: han tocado hueso, ya no podemos contribuir más a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud ni a la reducción del déficit público español”, afirmó.
Sin embargo, expresó su confianza en que la puesta en marcha del Plan Sectorial de la Industria Farmacéutica represente, de verdad, una oportunidad para que el sector en España pueda volver a ser un motor de la I+D y un paradigma del nuevo modelo productivo que necesita la economía.
Para ello, se han establecido cuatro Mesas de Trabajo, para tratar en cada una de ellas los temas más importantes que afectan al sector farmacéutico: Investigación y Desarrollo, Acceso al mercado, Utilización de Medicamentos y Competitividad industrial con las que se pretende crear una plataforma permanente de relación entre el Gobierno y el sector que permita diseñar un marco estratégico para el desarrollo de esta industria, que sea compatible con la sostenibilidad del SNS y con un servicio sanitario público de alta calidad.
El presidente de Farmaindustria concluyó mostrándose convencido de que el diálogo, el consenso y la proactividad con el Gobierno son esenciales para lograr escenarios que favorezcan el desarrollo del sector y potencien su inversión, permitiendo que la innovación siga siendo su motor y su principal compromiso con el paciente.
Por su parte, en su informe ante la Asamblea, el director general de Farmaindustria, Humberto Arnés, hizo hincapié en que las tensiones presupuestarias y financieras que padecen las comunidades autónomas en materia sanitaria proceden del agravamiento de la tradicional insuficiente dotación de recursos del SNS.
Al respecto, recalcó que mejoras en la eficiencia y reformas del sistema no son suficientes para hacer frente a las necesidades actuales en materia de salud, y abogó por considerar la sanidad una prioridad en la inversión pública, asegurando que hay margen para hacerlo pues el esfuerzo español en salud está dos puntos por debajo de la media europea, el sector salud genera un alto valor añadido y, además, la salud es la principal prioridad de los ciudadanos.