El Presidente y el Director General de FARMAINDUSTRIA, Jesús Acebillo y Humberto Arnés, acompañados por los Vicepresidentes de la Asociación, pidieron hoy al Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero la puesta en marcha de un Plan Sectorial para la industria farmacéutica, en el marco del Plan Integral de Política Industrial 2020, que potencie su desarrollo como sector de alta tecnología.
En un encuentro en el Palacio de La Moncloa, en el que estuvieron presentes la Ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, y el Secretario General de Sanidad, José Martínez Olmos, los representantes de la industria farmacéutica explicaron al Jefe del Ejecutivo que las últimas medidas de recorte del déficit, los Reales Decretos-leyes 4/2010 y 8/2010, han asestado un duro golpe a las posibilidades de esta industria para consolidarse como un sector referente del nuevo modelo productivo español.
En este sentido, insistieron en que los efectos de las últimas medidas de reducción del gasto farmacéutico incluidas en ambos Reales Decretos impactan muy negativamente sobre las compañías, puesto que verán reducido su mercado en más de 2.000 millones de euros al año, lo que supone un 15%. Como consecuencia de estos impactos, el sector prevé fuertes repercusiones en otras variables como el empleo y la I+D, siendo previsible, si no se toman medidas de apoyo al sector, una disminución de 5.000 trabajadores en el corto plazo, así como una reducción del crecimiento de las inversiones en investigación de unos 300 millones anuales.
Asimismo, los representantes de FARMAINDUSTRIA hicieron hincapié ante el Presidente del Gobierno en que la industria farmacéutica es un sector de actividad que comporta una serie de beneficios muy importantes para la sociedad y para el conjunto de la economía de nuestro país, entre los que citaron que se trata del sector líder en I+D y en biotecnología (con una inversión anual de más de 1.000 millones de euros, el 20% de todo el gasto en I+D del conjunto de la industria española); un sector de alta productividad; muy competitivo en los mercados internacionales (las exportaciones de medicamentos superan los 8.100 millones de euros y representan un 5,1% del conjunto de exportaciones españolas); fuente de empleo cualificado (alrededor del 50% de los empleados en la industria farmacéutica cuenta con estudios superiores y más de un 10% de la plantilla desarrolla su actividad en I+D); e inductor de efectos positivos sobre otros sectores (genera directamente 40.000 empleos en España y es responsable de otros 160.000 empleos indirectos en el resto de la economía).
Por todo ello, pusieron de manifiesto la necesidad de revertir la situación generada a raíz de las últimas medidas de ajuste, devolver la confianza en el mercado farmacéutico español y en su marco regulador, y garantizar el compromiso de los poderes públicos con esta industria para así afianzar el tejido industrial farmacéutico en nuestro país.
Junto al desarrollo de un Plan Sectorial, que involucre a todos los Departamentos concernidos (Sanidad, Industria, Innovación, Trabajo y Economía) y que proporcione apoyos para el desarrollo de este sector y estabilidad a las compañías, FARMAINDUSTRIA trasladó a José Luis Rodríguez Zapatero la importancia de que el Gobierno considere la deducción del 7,5% practicada recientemente en el precio de los medicamentos como una medida coyuntural que pueda ser revertida en función de la evolución económica en el futuro.
Por último, la industria farmacéutica innovadora defendió la aportación de financiación a las Comunidades Autónomas mediante instrumentos finalistas, de forma que los recursos sean aplicados efectivamente para reducir la deuda que las comunidades mantienen con sus proveedores sanitarios, que supera los 3.400 millones de euros, con un periodo medio de pago de 281 días, y que se mantenga la equidad y unidad del mercado.
Los representantes de FARMAINDUSTRIA consideran que, de esta forma, en un entorno regulador sectorial de estabilidad que genere unas expectativas empresariales adecuadas, el sector podría retomar en un futuro próximo la senda de la innovación y la generación de valor y estaría aún en condiciones de ser una industria emblemática del nuevo modelo de crecimiento económico que se necesita impulsar en nuestro país.