Los medicamentos son salud. Curan, controlan la enfermedad o alargan la vida y mejoran su calidad. Detrás de ello están los profesionales de un gran sector industrial, potente dinamizador de la economía y fuente de empleo cualificado, que está, por encima de todo, comprometido con la salud de las personas, la innovación y el sistema sanitario.
Este es el mensaje clave de un nuevo documento infográfico elaborado por Farmaindustria, y que refleja, a través de sus principales datos de actividad, cuál es la realidad de la industria farmacéutica asentada hoy en España.
Con una plantilla de 40.000 profesionales, de los que el 93% tienen contrato indefinido, el 51% son mujeres y el 27% son menores de 29 años, el sector farmacéutico es el responsable del 21% del conjunto de la I+D industrial en España, produce más de 15.000 millones de euros al año (el 24% de toda la alta tecnología) y es uno de los líderes en exportación, con el 27% de toda la alta tecnología.
Es, además, el principal impulsor de la investigación y el desarrollo industrial en el país, con 1.085 millones de euros invertidos en 2016, la mitad de los cuales corresponden a proyectos de colaboración con hospitales y centros de investigación públicos y privados. Los casi 2.900 ensayos clínicos de nuevos medicamentos promovidos en la última década por parte de las compañías farmacéuticas, con la participación de alrededor de 120.000 pacientes, dan idea de lo que implica esta actividad.
La industria farmacéutica constituye, pues, un sector de alta cualificación, ejemplo de moderno sistema productivo, que innova y crea riqueza para el conjunto de España a través del desarrollo de nuevas terapias para combatir la enfermedad, todo ello en el marco de uno de los sistemas deontológicos y de transparencia más exigentes de la economía española.