Varias compañías farmacéuticas con actividad en Europa han unido sus fuerzas para tratar de encontrar tratamientos efectivos contra la enfermedad de Alzheimer, una patología que provoca un profundo deterioro de la calidad de vida de los pacientes y sus familias. Para lograr este objetivo han puesto en marcha la Plataforma de la Enfermedad de Alzheimer, que parte del convencimiento de que para lograr nuevas opciones terapéuticas que permitan tratar la enfermedad, ralentizar su progresión e incluso prevenirla es necesaria la colaboración y abordar el problema desde nuevos enfoques que permitan aportar soluciones a los 11 millones de europeos que sufren Alzheimer u otras demencias, y cuyo número se prevé que crezca hasta los 14 millones en 2030.
Pero el Alzheimer no sólo tiene un enorme impacto en términos de salud y calidad de vida para los pacientes y sus familias, sino también para los sistemas sanitarios y la economía en Europa, tal como destaca la directora general de la Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia), Nathalie Moll: “El Alzheimer representa una enorme carga para los individuos, las familias y la sociedad. Pero también tiene importantes consecuencias económicas. En Europa, se estima que el coste de la enfermedad de Alzheimer alcanzará los 250.000 millones de euros en 2030, lo que equivale al PIB de Finlandia”.
En un artículo en la web de Efpia, Moll reconoce que el Alzheimer representa uno de los principales retos de la sanidad moderna, hasta el punto de que, pese a los enormes esfuerzos en materia de investigación de nuevos tratamientos realizados por parte de la industria farmacéutica e instituciones académicas, los ensayos clínicos llevados a cabo hasta ahora no han dado los frutos esperados.
“En cualquier caso, tales fracasos son parte del avance del conocimiento científico y nos motivan para redoblar nuestros esfuerzos. Cada ensayo clínico fallido nos permite aumentar nuestro conocimiento sobre la enfermedad y nos acerca al momento en que dispondremos de nuevos tratamientos que sean efectivos”, señala la directora general de la Efpia.
Para Moll, esta plataforma se enmarca además dentro de los objetivos planteados por la iniciativa europea #WeWontRest, que a partir del concepto No descansaremos que recoge su hashtag, apela al desafío constante que supone la enfermedad para la sociedad en general y para los pacientes y sus familias en particular, y a la necesidad de no cejar en el empeño continuado de buscar nuevas soluciones.
En concreto, la Plataforma persigue aportar nuevo conocimiento científico sobre los inicios de la enfermedad, reducir el tiempo de acceso a los pacientes a los nuevos tratamientos, impulsar el diagnóstico precoz y avanzar en la búsqueda conjunta de nuevas opciones de tratamiento para afrontar los principales retos del mal de Alzheimer.
“Rendirse no es una opción. Actualmente hay 135 ensayos clínicos en marcha sobre Alzheimer y nuevas vías para explorar mientras seguimos trabajando investigando opciones para ralentizar o prevenir esta enfermedad. Al mismo tiempo estamos redoblando nuestros esfuerzos e implicando a otros agentes que puedan compartir nuestro compromiso, y ese es precisamente el principal objetivo de la Plataforma: afrontar este reto juntos”, agrega Moll, que concluye subrayando que “no hay tiempo que perder”.