Realizar un adecuado análisis de las grandes cantidades de datos procedentes de la práctica clínica con medicamentos, y en especial de los resultados en salud de las innovaciones, será clave en el futuro inmediato para garantizar la eficacia y la sostenibilidad de los sistemas sanitarios. Por ello resulta esencial que los sistemas de regulación de precios de los medicamentos puedan adaptarse a este nuevo entorno, maximizando las posibilidades de acceso de los pacientes a los medicamentos más adecuados para ellos y asegurando el reconocimiento de la innovación.
“De esta forma conseguiremos que la regulación de precios de los medicamentos cumpla con sus tres objetivos fundamentales: maximizar la eficiencia del Sistema Nacional de Salud; dar respuesta a las situaciones nuevas que puedan darse en el mercado y contribuir a la sostenibilidad”, tal como ha indicado Pedro Luis Sánchez, director del Departamento de Estudios de Farmaindustria, durante una jornada del Capítulo Español de la International Society For Pharmacoeconomics and Outcomes Research (ISPOR), celebrada en Madrid.
A su juicio, es necesario afrontar ya los retos que el futuro plantea en el ámbito sanitario, tanto desde el punto de vista de la demanda (envejecimiento de la población, aumento de las patologías crónicas, etcétera) como de la oferta (avance científico, nuevas tecnologías que aportan esperanzas de éxito para el tratamiento de patologías complejas, etcétera).
Ante todo ello, según Sánchez, cabe preguntarse si están preparados los sistemas de precios de medicamentos para hacer frente a situaciones que serán frecuentes en el futuro como la existencia de productos con múltiples indicaciones; productos que se administran en combinación con otros ya existentes o fármacos que tienen diferente valor para distintos grupos de pacientes.
“Los sistemas regulatorios van a necesitar grandes cantidades de información acerca del valor que aporta y los resultados que consigue un fármaco tanto de forma previa a su comercialización, como durante el tiempo en el que esté en el mercado, y la buena noticia es que ya es técnicamente posible avanzar en esta dirección”, indicó el director del Departamento de Estudios de Farmaindustria.