“Dotar de más recursos al Sistema Nacional de Salud (SNS), gestionarlos más eficientemente, utilizar mecanismos de control presupuestario que compatibilicen sostenibilidad, acceso e innovación e impulsar la investigación son las claves para que nuestro sistema sanitario responda a las demandas de un país moderno que tendrá que hacer frente a nuevos retos, pero también a las oportunidades que se le presenten”. Así lo afirmó el director general de Farmaindustria, Humberto Arnés, este lunes en el foro virtual dedicado a la Financiación sanitaria en tiempos de crisis, organizado por la Fundación Bamberg.
Estas cuatro propuestas contribuirían a reforzar el SNS, cuyas debilidades ha puesto en evidencia la actual pandemia del coronavirus, a la vez que le permitirían hacer frente a tres grandes retos de futuro: el envejecimiento de la población, la cronicidad de las enfermedades y la revolución tecnológica digital y biomédica.
En cuanto a la necesidad de aumentar la financiación del sistema sanitario, Arnés recordó que, con datos prepandemia, España destina sólo el 6% de su PIB a la sanidad pública, cuando parece consensuado que “se debería dedicar en torno al 7% del PIB para que el SNS cubriera satisfactoriamente nuestras necesidades. Es decir, debería incrementarse la dotación del SNS en unos 7.500 millones de euros anuales”.
En este sentido, señaló que es hora de cambiar el lenguaje al hablar de los fondos públicos dedicados a la sanidad y al medicamento: “No son un gasto; son una inversión, con retornos a corto y a largo plazo desde el punto de vista sanitario, económico y social. En el caso de los medicamentos, no sólo permiten superar la enfermedad, sino que reducen o evitan otros costes sanitarios. Por cada euro invertido en medicamentos se ahorran entre 2 y 8 euros en otras prestaciones sanitarias”.
Sin embargo, no sólo se trata de invertir más, sino también de invertir mejor. En esta cuestión, Arnés subrayó que incluso en los mejores sistemas sanitarios se estima que en torno al 20% de los recursos se utilizan de manera ineficiente (repetición de pruebas diagnósticas, intervenciones innecesarias, utilización de tratamientos con efectividad limitada…), y la solución pasa por enfocar el sistema en la medición de los resultados en salud. “Las nuevas tecnologías digitales permiten trabajar en esta medición de resultados y costes de cada intervención sanitaria y optar en cada caso por la más eficiente. Es la mejor manera de gestionar un modelo con una calidad sostenible: ahorra costes y permite proporcionar la mejor solución para el paciente”, aseveró.
La tercera de las recetas de futuro señalada por el director general de Farmaindustria se basa en la introducción de mecanismos de control presupuestario novedosos y equilibrados que compatibilicen la sostenibilidad del SNS con el acceso y desarrollo de la innovación. En el ámbito del medicamento hay varios, como pueden ser la fijación de precios basada en el valor del tratamiento, el modelo de patentes o las nuevas vías de financiación de fármacos, como los acuerdos de riesgo compartido, techos de gasto, pagos diferidos o descuentos por volumen.
El medicamento, una inversión
Arnés explicó, por otro lado, que el medicamento en ningún caso es un problema para la sostenibilidad del SNS, puesto que “el 85% de los que se dispensan en las oficinas de farmacia son genéricos u originales que están a precio de genérico; es decir, más de cuatro de cada cinco envases que salen de las farmacias”. Además, en España el gasto dedicado a medicamentos es de un euro por paciente y día, y “con esa cantidad un paciente accede a un paracetamol y también a la última terapia celular para una enfermedad grave. Con estas cifras podemos erradicar la falsa creencia de que los nuevos medicamentos son una amenaza para las arcas públicas”.
Finalmente, estas medidas no serían completas sin una apuesta clara por la I+D. Arnés destacó de manera especial el valor de la investigación clínica, “que permite a nuestros profesionales sanitarios estar en la vanguardia del conocimiento, dar más oportunidades a los pacientes y captar recursos adicionales para el SNS. España, además, está muy bien posicionada en ese ámbito y puede constituirse en un referente internacional con una política de país aprovechando los fondos europeos de recuperación”.
Arnés compartió diálogo con los consejeros de Hacienda de Madrid y Castilla y León, Javier Fernández-Lasquetty y Carlos Fernández Carriedo, respectivamente; con el consejero de Salud y Familias de Andalucía, Jesús Aguirre, y con la directora general de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), Margarita Alfonsel.